Es un centro muy acogedor y familiar, cada uno de nuestros alumnos es importante, nos preocupamos por conocerlos a todos, no solo por sus profesores, también por el personal de administración y servicios, de esta forma las familias están tranquilas y cómodas, sintiendo que sus hijos están como en su propia casa.
Seguimos el modelo integrador de la Fundación Diocesana Santos Mártires, donde cada alumno es único e importante, no dejamos ninguno atrás, siguiendo un modelo de atención personalizada e individualizada.